Después de identificar exactamente cuáles son sus necesidades y exigencias, seleccionaremos los traductores más adecuados para llevar a cabo su proyecto. Los traductores trabajan exclusivamente hacia su idioma materno y conocen los contextos sociales, económicos, culturales y deportivos de los países de los idiomas de destino. Un revisor se encargará también de repasar la traducción ya terminada. Estos dos profesionales trabajan en estrecha colaboración y ponen sus competencias respectivas al servicio del proyecto. Finalmente, se procede a una última revisión interna antes de entregar el proyecto definitivo.
Para garantizarle un servicio de calidad, hemos creado un procedimiento de garantía de calidad que se basa en cinco aspectos: el estilo, la gramática, la ortografía, la precisión y la presentación. Esta garantía de calidad empezará en cuanto usted haya aceptado nuestro presupuesto, y es cuando se dará comienzo a la selección de los traductores más cualificados para llevar a cabo su proyecto. Después un revisor controlará el texto traducido.
Haremos todo lo posible para encargar sus traducciones en el futuro siempre a los mismos profesionales y así asegurar una cierta continuidad en el estilo y la formulación de los textos.
Tratamos todos los documentos recibidos y entregados con la mayor confidencialidad. Firmaremos un acuerdo de confidencialidad si así lo desea y nos aseguraremos de que todas las personas que participen en el proyecto firmen este mismo acuerdo.